R.E.M.

Vinieron, no fui, pero vinieron

Cuando estaba en el colegio no tenía televisión por cable, no había para pagarla ni tampoco llegaba a mi pueblo eso. Sin embargo, recuerdo que un día un amigo de escuela me dijo que me podía grabar algunas canciones en un cassette de video y entre ellos pude ver una de las mejores melodías que he escuchado en mis años de amor por el Rock, “Losing my religion” de R.E.M.

El baile de Michael Stipe siempre me dio alguna seña que el hombre era homosexual, por su baile con las alas, lo cual no era de mi interés porque siempre pienso que todos somos iguales.

Su llegada al Perú no la puedo relatar tanto como otros que si fueron al concierto, pero sé que algún día me podré sacar esta espina ya que tengo seguridad que volverán.

R.E.M., para los que no conozcan del rock puede ser un grupo más, pero hablar de ellos es hacer un listado de interminables buenas canciones que deben siempre estar en la memoria de cualquier computadora o en el separador de discos originales o piratas de su casa.

Son de lo más grande que puede haber escuchado y vaya que seguiré escuchando mucho más, si es que la vida me lo permite.

Escuchen “Shiny happy people”, "Losing My Religion", "We Walk", "Driver 8", "Electrolite", "Fall on Me", "Sweetness Follows", "So. Central Rain”, "Swan Swan H", "Nightswimming", "Country Feedback”, “Orange Crush”, “Everybody Hurts”, “I'll Take The Rain”, “Its the end of the world as we”, “Leaving New York”, “Man on the moon”, entre otras más.